Conmoción gracias a Bimbuñuelos

En los 70's había anuncios en la televisión en donde instaba a la gente a chocar una bolsa de Bimbuñuelos Bimbo contra otra, rompiéndolos así, y luego ya abrías la bolsa y te los comías a pedacitos. No recuerdo si era Chabelo quien lo promocionaba, o quien.

Resultase que mi hermano mayor y yo quisimos llevar al extremo dicha recomendación. Nos ubicamos cada uno en un extremo del pasillo de nuestra casa, nos arrancamos corriendo lo más rápido que podíamos, para unirnos en el centro del pasillo y chocar nuestras bolsas de Bimbuñuelos.

¡Ah, santo madrazo que me puse! Por primera vez en mi vida (y sólo se repitió una vez cuando jugaba fútbol americano infantil) quedé noqueado, con la mente en blanco, escuchando un zumbido, y me levanté con un fuerte dolor en la sinus.

La verdad no recuerdo si a mi hermano le pasó algo similar. Ya para cuando me levanté, el estaba bien. No estoy seguro que él recuerde este incidente.

Dicho sea de paso: hoy en día no me gustan nada los mentados Bimbuñuelos. No me los como ni por error. No creo que tenga que ver con este suceso, sino con que se me hacen de textura mala (nada peor que se que clave uno en el paladar), además de ser grasosos.